Posee una muy baja densidad de población y dos amplias lagunas, frente a las cuales se ubica la mitad de los lotes.

El diseño de Altamira ofrece una fluida circulación de la red vial que permite una continua relación con el agua.

El proyecto paisajístico busca resaltar la presencia de las lagunas; también con árboles cuyo colorido y floración producen un gran impacto visual.

La baja densidad de Altamira Barrio Privado es producto de que el 50% de los terrenos están en contacto directo con el agua y de que el 30% de la superficie total está ocupada por espejos acuáticos. Todo esto genera que la tranquilidad y la intimidad sean las características más distintivas de Altamira.

Dentro de las particularidades del barrio, una de las más destacadas es su baja densidad, que, combinada con su superficie pequeña, le dan a la urbanización un inigualable clima de privacidad, intimidad y tranquilidad.

Además, Altamira cuenta con dos lagunas de 5 hectáreas y el 50% de los lotes en contacto directo con ellas, lo convierten en un barrio de tipo lacustre.